Fronteras del Sistema: Delimitación Compleja

La delimitación de los sistemas, o la identificación de sus fronteras, es un desafío debido a varias características complejas. Según Johansen (2013), estos desafíos incluyen:

Características de la Complejidad

1. Dificultad para aislar componentes puramente mecánicos: Es casi imposible aislar componentes puramente mecánicos, ya que cualquier proceso implica múltiples niveles de complejidad. Por ejemplo, el acto de escribir requiere considerar procesos moleculares, neuronales y cognitivos involucrados. Esto está en línea con las ideas de von Bertalanffy (1989) sobre la interconexión de los sistemas.

2. Intercambio constante con el entorno: Los sistemas mantienen un intercambio constante con su entorno, trascendiendo sus límites inmediatos. Al escribir, no solo interactúan el brazo, el cerebro, el lápiz y el papel, sino también los recursos externos que influyen en el proceso. Existe un flujo continuo de energía e información entre el sistema y su entorno, como se discute en Ossa Ossa (2016).

3. Relaciones de causa y efecto recíprocas y dinámicas: Las influencias externas modifican el comportamiento del sistema, que a su vez impacta su entorno. Por ejemplo, las ideas de un autor pueden influir en el trabajo de otro, quien a su vez puede modificar las ideas del autor original. Esto refleja la naturaleza dinámica de los sistemas, como se analiza en García (2024).

Utilidad de Suprasistema y Subsistema

Para abordar esta complejidad, los conceptos de suprasistema y subsistema resultan útiles, el supersistema abarca los elementos externos que influyen significativamente en el sistema, mientras que, los subsistemas representan sus componentes internos. Al considerar estos tres niveles de organización (subsistema, sistema y suprasistema), se obtiene una comprensión más completa del comportamiento del sistema en estudio. Ver definición de frontera.